Existen numerosos factores que delatan la verdadera calidad de una cámara termográfica capaz de soportar los imprevistos del día a día en entornos de uso rudo. Es por eso que en este artículo te hablaremos sobre ellos para que puedas diferenciar entre un equipo profesional y de uno de calidad.
Contenidos de este artículo:
Características de una cámara termográfica profesional
1. Diferentes opciones de enfoque
2. Robustez, capacidad de supervivencia y formato
3. Autonomía y supervisión
4. Imágenes combinadas de luz visible y de infrarrojos
5. Posibilidad de cargar y compartir las imágenes de forma inalámbrica
6. Software avanzado de diagnóstico y elaboración de informes
7. Memoria robusta
8. Calidad de imagen para ver claramente los problemas
Las cámaras termográficas de baja calidad son equipos frágiles ya que no son sometidas a pruebas de caída para asegurar su resistencia, aunque pueden lucir como las cámaras de uso industrial en primer instancia, es fácil diferenciarlas ya que por lo general no cuentan con una resolución de imagen suficiente y requieren de un gran esfuerzo por parte del usuario para recopilar los datos de termografía.
Los equipos profesionales, por su parte, son robustos, duraderos y ahorran grandes cantidades de tiempo. Te aconsejamos revisar los siguientes aspectos en el equipo que estés considerando adquirir para confirmar que estás comprando una cámara termográfica de alta calidad.
Las cámaras de calidad cuentan con una avanzada tecnología de apuntar y disparar para ayudarte a enfocar objetos desde cierta distancia y desde más lejos. Esto es importante ya que una imagen de baja calidad o inexacta puede proporcionar datos que quizá no reflejen adecuadamente el nivel real en los componentes inspeccionados.
Realizar mediciones utilizando el enfoque fijo suele ser más rápido y preciso que utilizando el enfoque manual. En una cámara industrial la capacidad de enfocar con precisión es una característica habitual. Las cámaras con enfoque ajustable o manual son capaces de enfocar desde más cerca del objeto (a partir de 15 cm) para captar es obtener imágenes más claras y exactas aun en distancias más grandes. Incluso algunas cámaras cuentan con un puntero láser que permite ubicar el objetivo con mayor precisión.
Las cámaras de baja calidad no resisten un uso rudo o caídas accidentales, a diferencia de los equipos de calidad industrial que resisten todo lo que entraña trabajar en ambientes adversos.
La durabilidad implica que la cámara tenga una funcionalidad total en todos los aspectos:
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Una cámara termográfica de calidad permite manejar correctamente el nivel de carga de la batería para afrontar caídas de potencia no previstas con un indicador LED.
Los mejores modelos cuentan con baterías recargables de ión-litio para proporcionar la potencia requerida para las funciones más avanzadas con:
Los excelentes modelos de cámaras termográficas de la Serie TiS Performance de Fluke cuentan con un indicador LED para monitorear los niveles de energía en base a barras para tener una idea más concreta sobre cuándo es necesario recargar el equipo.
Las cámaras que captan imágenes infrarrojas permiten al usuario encontrar rápidamente los problemas potenciales combinando las dos imágenes (infrarroja y real) píxel a píxel, en una única imagen que facilita localizar el origen de un problema térmico.
Las cámaras termográficas Fluke Corporation patentó la tecnología IR Fusion®, para capturar de forma automática una imagen digital de luz visible al mismo tiempo que una imagen de infrarrojos para ayudar al usuario proporcionando una imagen completa en luz infrarroja o luz visible o en varios grados de combinación distintos.
Un equipo de alta tecnología permite visualizar las imágenes obtenidas en tu smartphone y computadora, esto permite al usuario permite ahorrar tiempo mostrando los problemas encontrados al momento a sus clientes o compañeros aún si es a distancia, además de ayudar a tomar decisiones rápidamente.
Evita viajes innecesarios a tu oficina gracias a la app Fluke Connect®, para que todos los miembros del equipo puedan acceder en cualquier momento a las imágenes de infrarrojos.
El software es vital para optimizar las imágenes, facilitar el análisis y permitir compartir archivos con en distintas aplicaciones con tus colegas, además de ser utilizado para analizar, ajustar y mejorar las imágenes de infrarrojos.
Además permite hacer ajustes para mejorar la calidad de la imagen gracias a funciones como distintos formatos de imagen, capacidad de combinar luz visible e imágenes de infrarrojos, etc.
Es vital contar con una cámara infrarroja con suficiente memoria interna para suplir las necesidades de almacenamiento de un uso frecuente, para ello es recomendable contar con varios gigabytes de almacenamiento para almacenar una base de datos de imágenes térmicas para diagnosticar máquinas consistentes con el paso del tiempo.
Además es preferible contar con entrada para una tarjeta SD extraíble para contar con almacenamiento extra y un acceso más rápido a las imágenes guardadas.
El enfoque de una cámara influye de forma directa en la precisión de los datos obtenidos durante las mediciones de temperatura, ya que una imagen mal enfocada puede tener un margen de error de 20°C o más.
Para obtener imágenes con la calidad requerida es necesario que más píxeles del detector se centren en el objeto. Una cámara con un campo de visión más amplio cuenta con un área más grande. Si dos cámaras tienen la misma resolución del detector pero una tiene un campo de visión más estrecho, esta normalmente generará imágenes más detalladas.
Esperamos que este artículo te sea de utilidad para aprender a diferenciar entre una cámara termográfica de calidad y un equipo de poca capacidad. Nuestro equipo de asesores especializados está listo para ayudarte a elegir el modelo más adecuado para tus proyectos.